6. La soledad de la recuperación.
Cada quien la vive diferente y a su propia conveniencia. Hay quienes la sufren y quienes la disfrutan (si es que el adjetivo puede ser utilizado).
El caso es que todo empieza a tomar su curso y la familia y amigos continuan su vida, pero uno sigue convaleciente, enfermo o en recuperación, y ya no es sencillo que nos brinden los mismos cuidados y atenciones que al principio, por lo que además hay que lidiar con la soledad del proceso curativo.
Las ausencias incluso fortalecen nuestro espíritu y nuestra salud.
Te recomiendo leer, escribir, pensar-reflexionar y orar. La soledad total no existe, sólo el individuo incapaz de estar consigo mismo.
#PinkforYou #25deNaranja
La soledad es un estado mental y su importancia es una decisión personal.